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RECURSO FORESTAL

REFORESTACIÓN

Plantaciones Forestales

Según la Ley Forestal, una plantación es el terreno en el cual se han instalado árboles de una o más especies forestales, nativas o exóticas, con fines de producción, protección o provisión de servicios ambientales, o una combinación de ellos.

Una Plantación de Enriquecimientos es la técnica o práctica de regeneración asistida, consistente en plantar especies forestales, en bosques primarios o secundarios con el fin de mejorar la producción y el valor futuro del bosque.

El establecimiento de plantaciones va acompañado de actividades de preparación de suelos (mejora la captación de nutrientes y humedad), como también avanzadas técnicas de control de malezas y fertilización de los suelos, lo que facilita el crecimiento de los árboles. Las plantaciones forestales se realizan mediante la participación de gran número de trabajadores capacitados y competentes.

Un uso sostenible de los bosques exige un adecuado equilibrio en las técnicas de silvicultura para mantener la adecuada proporción de bosques naturales y explotar las plantaciones de la forma menos dañina posible.

La plantación se puede realizar solamente en la época de lluvia. Es más, debe realizarse con las primeras precipitaciones, teniendo cuidado de que sean las establecidas del periodo. Es muy importante que antes de la plantación se haya tenido la adecuada capacitación en las actividades de extracción de plantas del vivero, el traslado, marcación, hoyación y la plantación propiamente dicha.

Factores para la elección del sitio

Es necesario tener en cuenta ciertos factores para la elección del sitio donde se realizará la plantación, como el clima, la topografía, el suelo, entre otros.

Clima: Se debe tener en cuenta la precipitación y la temperatura. La plantación debe aprovechar las primeras lluvias, con lo que se pretende lograr un buen prendimiento, afianzamiento de la planta, crecimiento adecuado y plantas fuertes. La especie a plantar debe ser resistente a la temperatura dad en el lugar de la plantación (heladas, altas temperaturas, cambios bruscos entre día y noche, etc.)

Topografía: Una ladera con exposición Este, recibe los primeros rayos solares del día y, por lo tanto, se calienta antes. En las zonas donde hay escasez de humedad, lo más importante serán las laderas con exposición Oeste para evitar la pérdida de humedad. En las húmedas, el hecho de que por las mañanas la temperatura del suelo sea mayor, ayudará al crecimiento de las plantas. La pendiente es importante; cuando es mayor a 70% ya no es posible hacer plantaciones. Las partes cóncavas son las que tienen mejores condiciones de suelo, ya que son más profundas y con mayor humedad, porque acumulan agua durante las lluvias.

Suelo: Es ideal hacer un análisis antes de la plantación para conocer las características físicas y químicas del suelo. Es importante tener en cuenta la textura, profundidad y alcalinidad del suelo (Ocaña, David, 1998).

Tipo de plantación o marcación

La distancia entre las plantas dependerá del objetivo y del lugar de la plantación. A distancias menores, se plantará mayor número de árboles por hectárea. A medida que se incrementan las distancias, los diámetros también aumentan y las alturas son menores, debido a la competencia por la luz existente entre las plantas durante su crecimiento. Asimismo, es necesario considerar la calidad del sitio de la plantación, ya que en terrenos poco profundos y pedregosos, la planta tendrá menor oportunidad de nutrientes, aguas, etc., existiendo una mayor competencia para poder crecer, por lo que necesitará espacios mayores que en los suelos profundos.

Existen diversos tipos de plantación:

Plantación en cuadrado o rectángulo: Se emplea normalmente para zonas llanas, con poca pendiente. Los plantones se deberán situar en los ángulos rectos del cuadrado o rectángulo, cuyos lados determinan el espaciamiento de la plantación. El espaciamiento adecuado de las plantaciones masivas en la sierra peruana es de 3m x 3m.

Plantación a tresbolillos: Este método se emplea en las laderas, porque la distribución de las plantas en forma de triángulos consigue una mayor eficiencia en el control de la erosión, debido a una mejor distribución radicular sobre el área con relaciones a los otros tipos de plantación.

Plantación en curvas de nivel: Esta es otra forma de marcar en las laderas. También controla la erosión, siempre y cuando vaya acompañada de zanjas de infiltración, las mismas que se construyen sobre la marcación hecha, para ubicar las plantas debajo de ella, las cuales ayudarán a retener el suelo y la humedad (Ocaña, David, 1998).

Apertura de hoyos

Luego de haber elegido el tipo de plantación que se quiere y haber realizado la marcación de los hoyos en todo el terreno, se da inicio a la apertura de los mismos. El tipo de hoyo tiene mucha trascendencia en la supervivencia y crecimiento de los arbolitos, especialmente en los primeros años.

Como regla general, se recomienda realizar hoyos de 40 x 40 x 40 cm, los cuales son los más adecuados para plantaciones en Sierra y hoyos de 80 x 80 x 80 cm en zonas de Selva alta.

Es importante hoyar con anticipación a la plantación propiamente dicha, esto debido a que hay mayor descomposición de los restos vegetales y el suelo flojo capta más agua de las primeras lluvias. Por ello, se recomienda comenzar con esta actividad los meses de Octubre y Noviembre (Ocaña, David, 1998).

Plantación propiamente dicha

Dentro del grupo de la plantación se debe responsabilizar a los que van a distribuir las plantas en los hoyos. Por cada 20 a 25 plantadores es suficiente un repartidor, lo que dependerá de la topografía del sitio a plantar y la distancia a dejar las plantas. Cuando la planta ya está en el hoyo, el plantador realiza la plantación propiamente dicha. Al momento de plantar se debe tener cuidado de invertir la posición de los montículos de tierra, poniendo al fondo los primeros 20 cm, así las raíces de los árboles entrarán en contacto con el suelo más fértil. Tanto para las plantas provenientes de platabanda como de bolsas, se debe tener cuidado de que la planta quede cubierta con tierra de 1 a 2 cm por encima del cuello de la raíz. Se apisona la tierra alrededor de la planta de afuera hacia adentro, dejando un espacio de 1 a 2 cm entre el borde del hoyo y la tierra apisonada, creando así condiciones para retener agua.

El mantenimiento de la plantación implica la Evaluación de la plantación y el Recalce de los plantones muertos o dañados. Estas actividades están programadas para luego de un año de establecida la plantación, es decir en la siguiente época de lluvias (Ocaña, David, 1998).